GATO: -¡Ya, que sí, que has visto un lindo gatito! ¿Y qué?
TÚ: -¿Qué hay de nuevo viejo?
GATO: -¿Me permites el tuteo, no? Pues...
¡Multíplicate por cero!
TÚ: -Minino ¿No te cansas a veces de equivocarte?
GATO: -Sí, tú, a veces intentar algo es el primer paso hacia el fracaso. Digo como gato, no como pato.
(Un espontáneo cruza velozmente la escena)
ESPONTÁNEO: -¡Beep, beep!
TÚ: -¡Marditoh roedoreh!
GATO: - Pero, te digo que siempre se llega a alguna parte, si se camina lo suficiente.
Tú: -Ya, pero yo no quiero sobrevivir, quiero vivir.
GATO: -Busca lo vital, no más, sólo lo que tienes necesidad, no más, y olvídate de la preocupación.
TÚ: -¡Hala, hasta el infinito y más allá no te jode, gallina!
GATO: - Hijo, digo hijo, digo, yo no soy una gallina. Y en tu caso, hijo, el milagro tardará un poco de tiempo.
TÚ: -¡Ea, ahora temporada de conejos, y de frijoles con sudores, no te jod..!
(Otro espontáneo: un conejo blanco con frac consulta su reloj y cruza precipitadamente la surrealista escena: tú hablando con un gato taquillero).
CONEJO ESPONTÁNEO: -¡Llego tarde, qué tarde llego!
GATO: -¡Yepa, ándale no más, Speedy!
TÚ: -¡Por los bigotes de mi tía! ¡Están locos este conejo y este gato!
GATO: -Hey, hey, hey Bubu, apúrate que éste nos quiere robar los emparedados.
TÚ: -Calma, calma, que no panda el cúnico.
Ya me los he comido, y fue sin querer queriendo.
(El gato se gira al interior de la caseta sin perderte de vista, busca la ayuda de alguien, y añade lo siguiente).
GATO: -¡Síganme los buenos!¡Haz algo, Patán!
TÚ: -Ya, ya, no contaban con mi astucia y todo eso ¡Viva el podeer perrunoo!
(Tú le das la espalda al gato y comienzas a alejarte andando, mientras, con dos dedos te afilas el mostacho de Pierre Nodoyuna. Ya casi fuera de escena te vuelves al gato que está a cuatro patas y con el lomo encorvado y erizado de rabia felina, y tú, todo chulería sandunguera, le dices alzando el brazo a lo Súper Ratón, lo que sigue).
TÚ: -No olviden supervitaminarse y mineralizarse. Este consejo te doy porque Popeye el Marino soy.
GATO: -Tú, tu oscuridad te pertenece, tú.
(Ya fuera de escena, se te oye decir de fondo, apagándote)
TÚ: -¡Mmm, y los emparedados de atún también, Gato, los emparedados también, mm!
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¡Eso, eso es to, eso es to, eso es todo amigos!
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Han colaborado con altruismo, en la elaboración de este tiesto de cámara oscura o pie de foto, varios personajes que aportan sus célebres muletillas constructoras de su identidad:
Piolín, Bugs Bunny, Bart Simpson, Homer Simpson, El Gato Jinks, El Correcaminos, Alicia, Wall-E, Baloo, Buzz Lightyear, Claudio, Cenicienta, Pato Lucas, el conejo de Alicia (no literalmente claro, me refiero a O. Cuniculus o Conejo de Fábula), Speedy González, el Gato Silvestre, Obélix, el Oso Yogi, Chapulín Colorado, Pierre Nodoyuna, Scrappy Doo, Superatón, Popeye, Mickey Mouse y Porky.
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Gracias a todos ellos por darme una infancia animada, y sirva de modesto homenaje por contribuir al ser que no soy, un poco al que soy, y puestos, al que hubiera querido ser y no conseguí ser, también, a mi ser imaginado y animado formado en la infancia con la suma de los axiomas que dichos personajes vertieron sobre mi imaginario vital.
¡Que te aspen a ti si lo entiendo yo!
Te entiendo, si quieres que me aspen. Esto no tiene ni pies ni cabeza.
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Érase que se era
el coloquio sin pies ni cabeza
de media fábula febril que fantasea.
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Fotografía:©Markus Lieben.
Tiesto:©Nemo.
