viernes, 22 de noviembre de 2019

Dirás que no lo he visto, pensarás que es mentira.





La sombra de un fantasma deambula a plena luz del día por el patio interior del Archivo de Indias.
Sevilla.




                                     
       Pasarela de playa con ínfulas de moda.





Puente del tren.
Cazalla de la Sierra-Villanueva del Río y Minas.







Cielo preñado de tormenta.
Isla Canela. Huelva.





En una noche de berrea la Hidra Arbórea abre sus muchas fauces al acecho de las alimañas nocturnas.
Finca El Berrocal. Sevilla.





En el corazón de un bosque de castaños la pared soñadora de una caseta de aperos se imagina un cielo azul con nubes algodonadas, mientras, acaricia su faz de cal la fresca sombra de una planta.
Bosque de Cobre. Málaga.





Crepúsculo a poniente.
El Berrocal. Sevilla. 






Rincón de otoño.





El rayón sombrío y húmedo de la rivera del Huesna resiste asediado por la línea de fuego de la sequía.
Río Huesna. Cazalla de la Sierra. Sevilla.






Agua, tierra y aire.





Oasis serrano.
Sierra Norte. Sevilla.





Bocana saciada por la altamar.
Puerto de Ayamonte. Huelva.





Faro de Chipiona. Cádiz.





Rincón sevillano.
Casco Antiguo. Sevilla.





Antigua cantera colmada de agua, en su orilla vi perpetrar, fragantemente, y de buena mañana, a un benemérito Número un delito de A.V.M.A.
--Alivio de Vientre a Mano Armada--.
Mientras, el Grupo Alfa de Operaciones Subacuáticas al que pertenece tomó posiciones para asegurar la zona, y evitar que algún elemento hostil impidiera tan delicada maniobra. El mojón debidamente bautizado y colmado de flores sirve ahora de hito geográfico y lugar donde aventar preces al ministro del ramo.

Lago de Villanueva del Río y Minas. Sevilla.







La puerta del cielo.
Madrid.





Estampa sevillana.
Plaza de San Francisco.





Agua y arena.





Mil y una, ventana como ninguna.

Sueña despierta una ventana con la alcazaba de un sultán almorávide en un reino lejano. En la niña de sus ojos se reflejan las almenas recortadas sobre un cielo con luna turca. Cuando el sol duerma a poniente, en el quicio del horizonte, el párpado de su persiana se cerrará; y tras el ajimez, no sólo el rumor de un rabel y el pizzicato de un laúd darán deleite al Walí, también el aroma a incienso del serrallo y la fragancia a canela, azahar y jazmín de las odaliscas que en el harén le esperan.

Punta del Moral. Huelva.

Nemo.

Fotografías: Markus Lieben.
Tiestos: Nemo.

domingo, 10 de noviembre de 2019

Sole. I. Uno, más dos, tres.




                                           Dedicado a todos
                                        aquellos que tendrán
                                    este relato entre sus manos
                                 y no lo leerán, y a Pepe Bola
                                        que tanto nos enseñó
                                     de la condición humana
                                            y sus debilidades,
                                           y a través de ellas
                                  supo mostrarnos el camino.

   





                                       Sole.


                                          I


--No te agineh, home. Enga, no me lloreh, miarma.
--¡Jefe, eg que...no veag, no veag...uztede-vojotro lo veiz tó mu fásil!
--A vé, Panduro, o zea, Romero Panduro, yo te comprendo, hijo. Cuéntame, vamo, ar er favó, explícate que to’s aquí te vamos a'yudá--El Jefe acompañó la aseveración mirando alrededor a su Corte de Apóstoles Custodios con Guantes de Cacheo, y, como un Pantócrato de Presidio abrió sus manos para consagrar la ofrenda de comprensión de boquilla, y de boqueras con un Curso de Habilidades Sociales, Modo No Presencial, a Dios gracias y al Sindicato también que dispensa regalías a troche y moche a sus serviles delegados sindicales--.
Gimotea Panduro, y, entre hipidos, pucheros y mocos sorbidos, continúa.
--Eg que...eeeh...eze mamón me debe 500 leuros y no me loz quiere devorvé, dise que nanai.
--Ezo no eh ná, compadre. ¡Tanquilo!, a poquito a poco. Amo a vel:
¿Quién es eze del que habra'g? ¿Tu cuñao er mancha?
--Zí, éze.
--Gandul de Lao, Emilio --apostilla profesionalmente uno de los Ángeles Custodios con Guantes, y a continuación, el denominado Jefe retoma la conversación dirigiéndose al interno plañidero-.
--Ira, Panduro, mi hermano, que eh artista, cantaor, me debe a mí, de la herensia, 18.000 napoh y er cabrón dise que no ahorra, que no llega ar finá de meh. Amo, que no me lo paga, y ¿T'he llorao yo a ti? Po no ¡Ea!
Por otra lao, si tú quiereh yo hablo con er mancha y ya verá...le meto mieo y se caga lah patah abajo. Seguro que te paga luego.
--Pero, eg que...eg que él tiene paga y yo no....y ensima me pide emprestao y no me lo devuerve....¡Cagon tó, yo lo mató en cuanto puea y aluego me rajo yo er pehcuezo!
Primero, asiente el Jefe, y luego, interrumpe al infausto abriendo nuevamente de brazos en cruz, como un Mesías de La Candelaria.
--No eh pa tanto, m' hijo, eh poca cantidá ¿A que hay Argo má?, te se nota.
Se limpia Panduro los mocos con el dorso de sus dos cetrinas manos, y sorbe después los restantes con sonido de cañería de bidé. Traga  miasmas y continúa.
--Eh verdá, hay más, Jefe, claro que hay mah....¡no lo v'aber!
--Te escucho....cucurucho.
--¡Eh, Don! no ze lo tome a guaza Jefe, que me rajo la barriga y ya está, y aluego...
--Que no home...eh la costumbre. Sigue y lo solusionamos.
--Güeno...eh que...er cabronazo der Milio tamién se está tirando a la Sole, a mi mujé. ¡Ya está! ¡Ya lo sabe uhté!
Dicho esto, Panduro lloró unos instantes con moco de enfoscar caras, e intercaló los sollozos con exclamaciones lastimeras. Perdió la compostura por momentos y prosiguió.
--Zoy un cornúo, Jefe, y ensima me chulea 500 leuros ¡me cago sus muertoh toh!
--Amos por partes. ¿Cómo se va a follá er desgraciao de tu cuñao a tu mujé si está preso como tú, concretamente en el Módulo 7 ¿Quién t'a dicho eso?
--No le puedo dicil quién, pero lo zé zeguro.
--Compare, lo que no pue sel, no é.
--Mu fásil, ze lo voy a ehpricá, ¡Me cago en er Copón!.
Hace el desconsolado una parada para boquear y a continuación se vacía.
--El hijoeputa d'er Milio y la perra de mi mujé ze lo han montado mu bien. Llevan ya un tiempo, no sé cuánto, teniendo vih a vih en Preventivoh, y yo acarajotao, escribiéndole cartah d'amó a la Sole, hasiendo planeh. La verdá, toy enmoriscao hazta lah trancah y zoy mah tonto que Jozemari...Totá que m'enterao antiel.
--Ezo cómo va a ser Panduro si los vis a vis los tendrá usté con ella, digo yo.
--¡Joder, me cago en mi estampa! Pos porque él solicita una comunicasión familiar con su madre, su padre, su hermano y mi mujé. Y aluego, er día de la sita ninguno de los tres se presenta y la zorra de la Sole sí. ¿Lo ha entendío ya, coño?
--¡Hotia, Panduro!, eeh...eeh...eeh...
Se produce entonces un lapso en la conversación, un extraño silencio suspendido que dura lo que una duda, roto al fin por el mismo Custodio que ya apostilló antes el nombre del cuñado del que, aquí y ahora, ostenta la cornamenta.
--Jefe, para rematar el cuadro, Ríchar, el aquí presente, está en el Módulo 52 ¡Y cómo en ese Módulo no abundan los cabrones ni nada! Pues, ya sabía tó cristo el cambalache, pero eso no es lo malo, no, lo peor es que, como usted sabe están pintando el Departamento entero y hay carteles por todos los lados con el aviso de: ¡Ojo! Recién pintado, mancha. Bueno, pues algún aficionado a la cartelería ha manipulado uno de los carteles y se lo han pegado a éste en la espalda sin que se dé cuenta --señala al mismo tiempo al encausado con el pulgar-- ¡Y no veas, no veas, el pitorreo toda la santa mañana! Éste, que está amamonao, se ha paseado media mañana con el sambenito, y el personal partiéndose el pecho de risa.
--Pero ¿Qué hohtia pone en el letrero, compadre?
--¡Ojo! Cornudo Reciente. Firmado: Milio el mancha.

Nemo.

                                              Continúa.................

Advertencia:
Cualquier parecido de los personajes o de lo que aquí se narra con la estúpida realidad no es responsabilidad mía. Para mí, lo real no es más que una fuente de inspiración, una más, porque lo que de verdad me satisface es lo imaginado, lo mínimo, lo intangible, lo singular, lo pensado, lo inútil, lo oculto, la utopía, las Ideas, lo prescindible, lo que no existe hasta que lo creas. Por todo esto, se pueden reconocer en los relatos elementos reales pero están prostituidos de idealismo, hedonismo, etc. O corrompidos por el simple capricho creativo.






Fotografías: Markus Lieben.


  

viernes, 1 de noviembre de 2019

Viaje a Mangurria. Las Hurdes y La Alberca. Contiene la transcripción literal de una de las páginas del Diario del Viaje a Mangurria de Nemo.



Viaje a Mangurria.

Ogaño, el atajo de Molano s'an arrejuntao en Horcajo, encá Lolo. Naide a fartao, t'oh han veniu meno loh abueluh que están maluh: asina, loj sevillanu han cojío el jato y de bureo, han atrochao por Coria como los langostos; log de Cáceres, velailoh, han veniu montau en un bicharracu; ende Arcuégca, pos log Canutoh y log de Juanju, tamién. Aluego, la casa sa llenau, unog al dobrao, algotroh ar tinao, en tog log lao. Toa la cabusía de la su casa embarullá, llena, sin dejá un buraco sin gurriatu. Una carrefilera de jachiperres jundeaos onde quiera.

Caicuando habemoh comío una jartá, sin añurgarnog nenguno, log calloh con mondongo de la Visi, la chacina cortá con pacencia pol la Juani, una catalvá de tortillah y empaná, nainá. Endigpué, mozoh y padreh, s'an apipaoh de golpi con bochincheh de pitarra arrebujao con cubatag. Los chiquininog zan entontecío pol la risina quelahazía er Miliki. Avé, er calambuco der Lolo cogió una güena mohca y no se jartó de dicil titulilloh que hacían rirse a tó cristo. Sostribaoh en cualisquiá, derringaoh y espatarraoh habemos queao, como murgañoh y fínfanoh alreeor d'una bujía. Endiluego, tupíoh toh, sin empelotarse, ar camastro, zancajo con zancajo.

Er Juanjo ha dao su Concierto n°2 para Ronquío, Resoplío y Tompreta (Opus 53), Coro de Toseh, Carraspeoh y Eruptíoh a cargo de la Colanía del Pozanco. -Er Canutoo contimag le chasqueaba al tenol, po mág jipíoh daba er d'Arcuégca-.

Texto: Nemo.

Transcripción de una de las páginas del "Diario del Viaje a Mangurria" escrito por Nemo en un Castúo arrinconado entre la fusca de su nacencia, los garabatos de la infancia y el  titilar de los recuerdos de juventud.






Sinécdoque de Horcajo por relumbre de un charco.






Tocón ahogado.






Otoño.






Agua de otoño.






Puente sobre el Río de los Ángeles.
Pinofranqueado.






Cierro mis postigos y sólo veo el tiempo huido
oigo
el resonar de voces de los gañanes
 que se apagan en el cementerio
y siento
el vaho frío
en mis estancias, vacías
de amos que ahora son esclavos
en otras tierras
donde les nombran maquetos, charnegos
o paletos
sea Getafe, Mataró o Baracaldo
allí me sueñan abierta a la sierra
oír el rumor
del agua
en
el horcajo.


Nemo.



-ventana de Horcajo-.






Primera luz.






De puente...







Asedio de un pinar a unos álamos justo en el horcajo.






 
El marrano de San Antón de La Alberca no es de piedra, tiene carne magra y tocino, es bendecido, liberado y alimentado durante todo el año por los vecinos del pueblo para luego...

        * -Abstenerse de ir por allí gentes de
         mal comer y sobraos con tendencias
         moraloides que suelen decir a todo cristo                 cómo ha de vivir o qué debe comer.
         Gracias.






Amanece en estos andurriales.







Recodo en el camino hacia El Moral.






Cielo con arbotantes de pino.







Sierra Corredera-Sierra de Gata.







Horcajo junto a sus álamos.







Postes de la luz creciendo en la Sierra de Gata.






A 10.000 pasos.






Callejero de Al Bereka con aire hebreo y árabe.






Cárcel de la Alberca.






Soportales.
-La Alberca-.






Poyetes al fresco esperan traseros que le cuenten historias de otras épocas.
-La Alberca-.








Casa con Lancho.
-La Alberca-






La Casa Locomotora.
Ovejuela (Cáceres).





...a puente...






 Chorritero de Ovejuela.





       
                                     *Alfa.


Fotografías: Markus Lieben.

 *(excepto la titulada Alfa que la disparó el ínclito, el boticario, el festivalero y terror de los cuartos de aseo: The Grasshopper).

Tiestos: Nemo.

Poenema: Nemo.

Localización: Las Hurdes (Cáceres) y La Alberca (Salamanca).